El don de Ariadna #1 ~ Nando López

¡Buenas tardes, Devoradores!

Hoy regreso con una nueva colaboración de SM. La verdad es que conocía el libro por las newsletters y porque me llamó la atención que tratara temas de mitología griega, pero lo fui dejando pasar. Al final, tuve la suerte de hacerme con él y decidí darle una oportunidad. Ahora no me arrepiento de ello. ¡Vamos allá!

Título: El don de Ariadna

Saga: La leyenda del Cíclope #1

Autor: Nando López

Editorial: SM

Ilustraciones: David Benzal

Género: Distopía / Fantasía / Ciencia Ficción

Páginas: 200

Encuadernación: Tapa dura

ISBN: 978-84-1318-984-0

Ypsilon, año 10 del Nuevo Orden. El país se prepara para el Aniversario del Incendio que lo cambió todo. Diez años de censura, represión y felicidad impuesta. Diez años huyendo de los Cíclopes y siguiendo las huellas de los Dos Ejes. Pero ahora los Rebeldes cuentan con un arma secreta. Su nombre es Ariadna. Y tiene un don.

OPINIÓN PERSONAL

"—Por eso mismo, pequeña: sabes que no es seguro jugar a nuestro juego a plena luz.

Así lo llamaba su padre: «nuestro juego». Y así lo sentía entonces Ariadna, aunque ahora supiera que era mucho más que eso, porque su vida y la de su familia dependían de que fuera capaz de ganar la partida."

De acuerdo, comenzamos con la historia. Ariadna acaba de ser capturada y separada de sus padres. Como parte de los Rebeldes, llevan toda la vida huyendo de refugio en refugio, siempre custodiando un ejemplar de la Odisea de tapas quemadas. Solo Ariadna, a sus doce años, es capaz de utilizar todo el potencial del libro.

Aunque la joven consigue huir del Tártaro, una de las cárceles del Nuevo Orden, sabe que ella sola no puede hacer nada para salvar a sus padres. Mientras busca aliados, conoce a T. y a sus padres, tres rebeldes que dejarán su hogar para ayudarla a encontrar Ítaca, el legendario refugio de libros prohibidos.

Sin embargo, el Aniversario del Gran Incendio se acerca y Ariadna sabe que sus padres no tienen tiempo. Mientras busca a los rebeldes e idean una forma para rescatar a los prisioneros, Ariadna tendrá que aprender a usar su poder para conseguir una oportunidad que les permita arruinar los planes de Némesis, la presidenta de Ypsilon.

"La aparición de los Cazadores, hombres y mujeres que se adherían a las tropas de los Bibliófagos a cambio de jugosas cantidades de dinero, los habían obligado a convertirse en nómadas, arrastrando consigo las obras que protegían.

De este modo, los Refugios acabaron transformándose, a la vez, en su hogar y en su misión: los Rebeldes habitaban los lugares que debían proteger, de modo que sus vidas estaban ligadas a las de esas historias de las que eran los últimos guardianes."

Y esa es más o menos la historia. A sus doce años, Ariadna es una de las piezas clave de los Rebeldes, un grupo que lucha por acabar con la falsa paz de Némesis, la presidenta de Ypsilon. Desde pequeña, la niña ha aprendido a usar su don gracias a sus padres: es capaz de invocar durante un tiempo a los personajes de la Odisea, uno de los libros pertenecientes al Índice Prohibido, una recopilación de títulos que han sido vetados en la sociedad ypsiliana.

Sin embargo, un grupo de cyborgs cíclopes encuentran su escondite y les arrestan, separando a la niña de sus padres. Mientras planea cómo escapar de la celda del Tártaro, Ariadna recurre al único tesoro que ha podido salvar: su ejemplar de la Odisea, considerado el Primer Eje de los libros prohibidos. Usando su don, la chica huye y busca aliados para rescatar a sus padres.

Lo que menos espera es que los Rebeldes la encuentren primero. Tras pasar la noche en una zona abandonada, Ariadna conoce a T. y a sus padres, Layo y Orión, que cuidarán de la joven. Pero los cíclopes no tardan en encontrarlos y los cuatro deciden buscar el único sitio en el que estarán a salvo: Ítaca, el refugio rebelde más seguro y escondite de cientos de libros “rescatados”.

Una cosa que me ha gustado mucho de la historia es la cantidad de referencias a la mitología griega que encontramos. Ypsilon es una ciudad dirigida por Némesis y su consejo, un grupo de personas influyentes que se hicieron con el poder tras el incendio que acabó con Orfeo, el antiguo gobernador, y con Galatea y Pigmalión, sus fieles aliados. Desde la tragedia, han bombardeado a la población con publicidad, comunicaciones y eventos para volver a la gente en contra de los rebeldes y mantener el poder.

Otro aspecto que me ha gustado es el uso de nombres de la mitología griega. Tiene una explicación que me ha llamado mucho la atención, sobre todo por lo estratégica que es, aunque prefiero no contarla porque igual es spoiler. Solo decir que, tanto en un bando como en otro, encontramos muchísimas referencias. En Ypsilon, por ejemplo, tenemos a Némesis, Argos, Moira o Hermes. En el grupo rebelde, en cambio, están Dédalo, Leda, Calipso o Ariadne. Incluso Ariadna, sus padres y los padres de T. tienen nombres relacionados con dicha mitología.

La trama va intercalando capítulos de ambos bandos, con Némesis y Ariadna como principales perspectivas, aunque no las únicas. La niña, que es nuestra protagonista, me ha parecido muy real. Tiene un don, sí, pero no deja de ser una joven de doce años que quiere salvar a sus padres. No es una niña dispuesta a luchar contra la tiranía porque sea su vocación, ni es una heroína todopoderosa. T. también tiene su importancia, aunque creo que se hablará más de él en el siguiente libro.

En resumen, es una historia muy sencilla de leer, con un montón de referencias que pueden resultar adorables si os gusta la mitología. La trama se sigue muy bien, aunque quizá al principio cuesta ubicarse un poco. De primeras pensaba que era una historia pura de ciencia ficción, pero cuando llegaron los toques de fantasía cambié de opinión. Me he quedado con las ganas de leer más, la verdad. Y las ilustraciones del principio, así como los esquemas de ambos bandos, me han gustado mucho. ¡Nos vemos!

Lo mejor: La trama y Ariadna.

Lo peor: El principio un poco confuso.

"Tras una noche casi interminable, el amanecer sorprendió a Némesis y a Ariadna desveladas, con los ojos abiertos y la piel sudorosa a causa de las pesadillas que habían sufrido durante los escasos intervalos en que habían conseguido dormir.

Las dos se pusieron en pie con decisión, resueltas a tomar las riendas de su destino.

Ambas estaban dispuestas a lanzar con fuerza los dados sobre el tablero del azar.

La partida había comenzado."

NOTA

4,5/5

Una nueva Odisea