El Aprendiz Silencioso ~ Gabriel Sánchez García-Pardo

¡Buenas tardes, Devoradores!

Hoy vengo para traeros la nueva obra de Gabriel Sánchez, al que ya os presenté con El vals de las hadas malditas. La verdad es que esta novela me ha gustado mucho, tanto por la historia como por el maquetado. Ahora os cuento más. ¡Comenzamos!

Título: El Aprendiz Silencioso

Saga: Autoconclusivo

Autor: Gabriel Sánchez García-Pardo

Editorial: Naufragio de Letras

Género: Fantasía / Aventuras

Páginas: 240

Encuadernación: Rústica con solapas

ISBN: 978-84-120898-2-0

En el mundo de Alatea, la magia tiene sus propias reglas. Muy pocos consiguen el Gorro Estrellado. Muy pocos logran ser admitidos en la Torre Noctívaga.

Los Magos Errantes vagan por todo el Reino haciéndose cargo de las Escuelas de Enseñanzas Sencillas de las distintas poblaciones. Solo puede haber un mago en cada región. En la tranquila aldea de Alborada, sin embargo, han llegado a juntarse dos. Un hecho insólito y que podría significar algo terrible…

En estas extrañas circunstancias llega a la aldea Locuaz, un joven avispado y ansioso por aprender. Locuaz tiene un talento especial para la magia; no hay conjuro que se le resista. Su único problema es que de sus labios no puede salir el más leve sonido.

Ni una sola palabra.

OPINIÓN PERSONAL

"Resuelto pero obediente. Valiente y a la vez cauto. Locuaz poseía todas la cualidades necesarias para cumplir su sueño de convertirse en un gran mago. Solo tenía que lidiar con un pequeño inconveniente que hizo su estancia en la aldea un poco más difícil...

De sus labios no podía salir el más leve sonido.

Ni una sola palabra."

De acuerdo, empecemos con la historia. Todo comienza con Novelo, el famoso cuentacuentos de Arbolada, que se dispone a relatar la gran historia de Locuaz, un joven aprendiz de mago, y cómo fueron sus aventuras en el humilde pueblo. El joven, que era incapaz de hablar, llegó con un objetivo: ser el aprendiz de uno de los dos magos que vivían en Arbolada, algo inusual.

Sin embargo, había un problema: uno de los magos, Clementius, ya tenía una aprendiz; y la Magumbra, la bruja oscura y terrible, era una opción bastante aterradora. Para colmo, Arbolada estaba en peligro: a las afueras del pueblo se encuentran los Funebros, espantapájaros poseídos por entes diabólicos que, cada noche, dan un paso y se acercan más al pueblo.

Locuaz deberá buscar a un maestro entre las dos opciones y ayudar en todo lo posible a impedir que la terrible desgracia llegue a las calles de Arbolada, cuyos habitantes desconocen el gran peligro que está por llegar y desde el lugar, o persona, más inesperado.

"El Togado le devolvió la carta a Locuaz, se recostó de nuevo contra aquella dura silla que parecía sacada de una cámara de torturas y miró a Locuaz de arriba abajo.

—¿Eres mudo y te pusieron Locuaz?

Ojos en blanco. Otra vez la bromita."

Y esa es más o menos la historia. Toda la trama está contada por Novelo, nuestro narrador y cuentacuentos particular, un anciano ciego que vive en Arbolada y que se hizo pasar por el abuelo del joven aprendiz que llegó al pueblo en busca de un maestro. Locuaz, que era el nombre del chico, era un joven amable y valiente cuyo objetivo era ser el aprendiz de uno de los dos magos del Arbolada.

Su primera parada fue la casa de Clementius, un mago famoso por sus hierbas y pociones, que era querido por los aldeanos. Sin embargo, el hombre ya tenía una aprendiza, Rim, una chica guapa y pelirroja que hablaba rimando y que se desplazaba en un palo de criquet mágico.

Al ver que no podía aceptar a otro aprendiz por falta de tiempo, el mago Clementius y el Togado del pueblo planearon una misión para Locuaz: hacerse pasar por el aprendiz de Umbra, la Magumbra, una bruja oscura que vivía a las afueras y que, según los dos hombres, se trataba de la antigua maga del rey, una proscrita.

Junto al anciano Novelo, que acogió al chico y siempre se preocupaba por él, Locuaz trató de mezclarse con la gente de Arbolada y con la Magumbra, cuya mera presencia era suficiente para pudrir las plantas necesarias para las pociones. Sin embargo, el misterio de los Funebros, y la explicación sobre su presencia, llevaban implícita una aventura aún más peligrosa y que estaba a punto de llegar.

La verdad es que no quiero contaros mucho para no destriparos nada, así que aquí me quedaré en la trama. La historia es muy dinámica, llena de aventuras y situaciones realmente fascinantes. Aunque Locuaz no puede hablar, vemos muchas veces los gestos que hace y cómo reacciona a los peligros, por lo que creo que es uno de los protagonistas a los que más cariño he cogido en poco tiempo.

Novelo, que es nuestro narrador, también es muy importante en la historia. Es un anciano ciego con mucha vida recorrida, por lo que dispone de muchos conocimientos y vivencias que serán importantes en el transcurso de la trama.

Dentro de los aldeanos, tendrán mucha importancia el Togado, que es algo así como el alcalde; Clementius, el mago; Rim, la aprendiza del mago y chica de la que se encariñará mucho Locuaz; y los tres niños traviesos, Eggo, Perso y Fisga, los cuales serán los primeros en poner en peligro a Locuaz. También cabe destacar a Umbra, la bruja oscura que aterra al pueblo y a la que echan la culpa de los Funebros, pese a su posterior e importante implicación en la trama.

Además de la portada, que me parece preciosa, encontramos en el interior del libro ilustraciones y dibujos que ayudan mucho en la historia. El primero es un mapa de Arbolada, lleno de detalles bastante curiosos. La historia se lee muy rápido y, como he dicho, está contada en primera persona desde la perspectiva de Novelo, que se encargará de contar la aventura de Locuaz.

Y eso os contaré. La verdad es que es un libro que he disfrutado un montón. Encontramos todo tipo de personajes en esta aventura, cada cual más variopinto que el anterior. Hay situaciones tensas y de peligro que enganchan. Y, aunque al principio parece que la trama es muy sencilla, luego realmente se entremezcla con toques del pasado que nos han ido dejando caer. Si queréis una lectura ligera, con toques mágicos y una aventura fascinante, este es vuestro libro. ¡Nos vemos!

Lo mejor: El avance de la trama y el personaje de Locuaz.

Lo peor: Una aventura un poco breve.

"—¡Es el puesto de venta de Clementius!

Un golpecito en el hombro.

—Has ido a verlo, ¿no?

Un golpecito.

Suspiré. Empezaba a ver clara la situación.

—Y te ha pedido que te encargues de vender sus hierbas...

Resoplido de agobio. Un golpecito."

NOTA

5/5

No toquéis a los Funebros